Abstract: La integración de la flexibilidad en los espacios educativos nace de la necesidad de adaptación del entorno físico de aprendizaje ante los requerimientos de la transformación pedagógica del siglo XXI. El objetivo de este estudio fue analizar espacios educativos de pequeña escala que se declaran, desde la institucionalidad, alineados con el cambio de paradigma educacional. A partir del desarrollo de una metodología de análisis que evalúa las intenciones arquitectónicas que contribuyen a la flexibilidad de uso y a la flexibilidad espacial, los resultados indicaron que la integración de criterios de diseño ha sido eficiente en los ámbitos de proporción espacial, multifuncionalidad de uso y convertibilidad de los recintos. Sin embargo, se desprende que sería necesario avanzar en la integración de mobiliario y elementos flexibles para promover la adaptación del espacio. Finalmente, se discute la importancia de continuar investigando los aspectos del diseño y en la ocupación de espacios educativos que apoyar los enfoques didácticos emergentes.